Meditaciones
En este artículo y durante los siguientes artículos de esta sección, compartiremos meditaciones bíblicas de Mateo capítulos 5, 6 y 7. ¿Qué encontramos ahí? ¡Claro! El sermón del monte, las preciosas palabras de paz, de enseñanza, de amor que Jesús expresó a una multitud.
¿Qué pasó antes del sermón del monte? Jesús fue bautizado por Juan el Bautista, pasó después la tentación en el desierto, y luego llegó a la región de Galilea, una región marítima, y ahí Jesús estuvo predicando, enseñando, sanando. Les predicaba: "Arrepentíos, porque el reino de los cielos está cerca" (Mateo 4:17). Y dice la Escritura que "el pueblo que estaba en tinieblas vio gran luz" (Mateo 4:16).
"Jesús recorría toda Galilea, enseñando en las sinagogas, predicando el evangelio del reino, y sanando toda enfermedad y dolencia de la gente. Su fama se extendió por toda Siria. Y le traían todos los que se sentían mal, los afligidos de diversas enfermedades y tormentos: endemoniados, lunáticos y paralíticos. Y los sanó" (Mateo 4:23,24). También "lo siguió gente de Galilea, Decápolis, Jerusalén y del otro lado del Jordán. Jesús Vio a toda esa multitud, y subió al monte. Ahí se sentó... y empezó a enseñarles" (Mateo 4:25-5:2). ¿Cuáles fueron las primeras palabras de Jesús para toda esta multitud que le seguía deseosa de escucharlo? Sus primeras palabras fueron las famosas bienaventuranzas. ¿Las has escuchado? Puedes leerlas en Mateo 5:3-11, y te daré una explicación de cada una de ellas.
Bienaventurado quiere decir "feliz", "alegre".
